Por primera vez un estudio cuantifica el valor de las ventajas de los cojinetes de plástico igus
- Publicado el 03 de Abril de 2024
Un estudio realizado en conjunto por igus y científicos de la Universidad Técnica de Aquisgrán, conocida como RWTH Aachen, revela el ahorro potencial al utilizar cojinetes plásticos libres de lubricación igus en lugar de cojinetes metálicos convencionales: hasta 14 millones de euros al año. Además, el estudio incluye un análisis del impacto ambiental en la planta de producción de cerveza Heineken.
Los cojinetes metálicos convencionales necesitan ser lubricados de manera continua, mientras que los fabricados con plásticos de alto rendimiento no requieren esta lubricación constante gracias a la integración de lubricantes sólidos, lo que genera ahorros considerables. Según el estudio realizado por los científicos de la RWTH, dependiendo de la aplicación, las empresas pueden reducir entre 7.000 y 14 millones de euros al año. Además, disminuyen las horas de trabajo anuales necesarias para la lubricación manual de los puntos de apoyo, concretamente, entre 8.000 y 2.000.000 de horas.
Stefan Loockman-Rittich, director del Departamento de Cojinetes iglidur de igus, señala: «Las cifras demuestran de manera impresionante cómo un cambio aparentemente pequeño puede resultar en ahorros significativos en costes y recursos». Por ejemplo, uno de los participantes en el estudio, la cervecera Heineken Brasil, ahorraría 20 toneladas de lubricante al año, lo que equivale a 450.478€, y reduciría los costes de personal en 5,4 millones de euros, si equipara todas las cintas transportadoras de sus 160 plantas en todo el mundo con cojinetes de polímero.
El estudio de la RWTH calcula por primera vez el impacto ambiental positivo de los cojinetes fabricados con plásticos de alto rendimiento de igus. Un ejemplo concreto es el de Heineken Brasil, que consiguió ahorrar un total de 180 kg de CO2 al año al sustituir los cojinetes metálicos por cojinetes de polímero en 600 puntos de apoyo. «Si todas las sucursales de Heineken hicieran el cambio a cojinetes de polímero, la empresa podría ahorrar 28,814 kg de CO2. Esta cifra es significativa teniendo en cuenta que se trata de un cambio pequeño», afirma Loockman-Rittich.
Para ponerlo en perspectiva, cuando un vehículo consume un litro de gasolina, emite aproximadamente 2,37 kilogramos de CO2. Por lo tanto, el ahorro equivaldría a más de 12.000 litros de gasolina. Stefan añade: «Cada vez más fabricantes de máquinas, sistemas y vehículos sienten la presión de revelar la huella de carbono de sus productos. Por ello, nuestros clientes están encantados de poder hacer referencia a una evaluación científicamente respaldada de las ventajas medioambientales de la autolubricación de nuestros cojinetes».
El estudio independiente fue encargado a WBA Werkzeugbau, una empresa de investigación que colabora con el Laboratorio de Máquina Herramienta (WZL) y el Instituto Fraunhofer de Tecnología de Producción (IPT) en el campus de la RWTH de Aquisgrán. Este campus alberga uno de los mayores laboratorios de investigación de Europa en el ámbito de la tecnología de producción. Los resultados se basan en entrevistas realizadas a expertos de nueve empresas pertenecientes a los sectores de tecnología de automatización, maquinaria de construcción, agricultura, alimentación, envasado y embotellado.