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Cinco formas en las que la digitalización de la inspección de productos contribuye a la conformidad de la seguridad alimentaria

  • Publicado el 28 de Febrero de 2023

La seguridad alimentaria y la conformidad con las normativas son asuntos muy relevantes para los fabricantes de alimentos. Ian Scott-Mance, director de tecnología de Mettler-Toledo ProdX™, analiza cómo las tecnologías de inspección de productos digitalizadas pueden ayudarles a satisfacer estas demandas.

Cinco formas en las que la digitalización de la inspección de productos contribuye a la conformidad de la seguridad alimentaria

La seguridad alimentaria es de vital importancia; por ello, la industria alimentaria está cada vez más regulada. El éxito de los fabricantes de alimentos, tanto en la actualidad como en el futuro, radica en su capacidad de producir alimentos seguros y de gran calidad, así como de demostrar de forma incuestionable que los procesos empleados para fabricar dichos alimentos cumplen con las exigencias normativas.

Hoy en día, la tecnología ayuda a los fabricantes a adaptarse a estos requisitos. Los estándares de seguridad y calidad alimentaria en la producción se pueden mejorar mediante la aplicación de sistemas de inspección de productos por rayos X, detección de metales, control de peso e inspección por visión. Al mismo tiempo, gracias a la digitalización de gran parte de los equipos de la línea de producción (y, en concreto, a la tecnología de inspección de productos) se está simplificando y facilitando la conformidad con las normativas de seguridad alimentaria. La tecnología de inspección digital es capaz de supervisar y registrar continuamente el rendimiento de la línea de producción, algo que los procesos manuales no pueden igualar. Además, los propietarios de estándares y los organismos reguladores se están centrando cada vez más en la transformación digital de la seguridad alimentaria. Con la digitalización, se puede respaldar mejor la conformidad con las normativas de seguridad alimentaria. Asimismo, cada vez hay más expectativas de que los fabricantes de alimentos la adopten.

Por lo tanto, la digitalización de la inspección de productos influye directamente en la capacidad de los fabricantes de alimentos de demostrar la conformidad con la seguridad alimentaria. La conformidad se puede mejorar mediante una serie de aspectos operativos. En este artículo, tratamos cinco formas en las que la inspección de productos digitalizada mejora la conformidad con la seguridad alimentaria.

1. Registro del rendimiento a prueba de manipulaciones

Los sistemas de inspección de productos digitalizados supervisan y registran constantemente los datos de rendimiento, compilan la actividad autenticada a medida que ocurre y aplican las funciones de seguridad adecuadas para asegurar que no se puedan manipular los datos recogidos. De este modo, los fabricantes de alimentos, auditores, organismos reguladores y clientes pueden confiar en que se está manteniendo un rendimiento óptimo de inspección de productos.

Esto se aplica sobre todo a lo referente a las actividades de verificación del sistema. Cuando se lleva a cabo una comprobación en el equipo, se registra automáticamente una serie de datos, de modo que se verifica la realización de la comprobación y se almacenan los resultados de esta, así como otra información relevante, con una marca digital de fecha y hora que no se puede modificar. De esta forma, no se puede ocultar nada; los resultados de las comprobaciones no se pueden falsificar ni alterar sin que el culpable deje pruebas, y los auditores que examinen los registros podrán detectar cualquier anomalía. La fiabilidad que esto confiere a los datos resulta vital para la conformidad con la seguridad alimentaria.

Cinco formas en las que la digitalización de la inspección de productos contribuye a la conformidad de la seguridad alimentaria

2. Supervisión en tiempo real de los puntos de control críticos

La inspección de productos es más eficaz si se emplea en los puntos de control críticos (PCC) de la línea de producción, donde puede identificar problemas que afectan tanto a la calidad del producto como a la seguridad alimentaria. La inspección de productos digitalizada lleva a cabo esta función en tiempo real y puede advertir de los problemas de la línea de producción de forma inmediata. Esto permite al fabricante intervenir rápidamente y abordar cualquier problema, lo que puede evitar el desperdicio de un gran volumen de productos o ingredientes, así como la necesidad de ponerlos en cuarentena y reprocesarlos. Además de mejorar la eficiencia de la producción, reducir el desperdicio y ayudar a asegurar que solo salgan de la fábrica productos de buena calidad, esta capacidad también proporciona datos que respaldan la conformidad con las normativas de seguridad alimentaria.

3. Automatización de la recopilación de datos y la elaboración de informes

En todo el mundo, los fabricantes de alimentos deben cumplir con las normativas nacionales, regionales y de la industria para asegurarse de que sus productos sean seguros. Asimismo, esto les ayuda a centrarse en una serie de áreas, como el HACCP, la trazabilidad, la prevención del fraude alimentario, el compromiso de los directivos y la política de seguridad alimentaria.

La digitalización de la inspección de productos consiste en recopilar de manera automática los datos de los distintos procedimientos, como las comprobaciones del sistema, la gestión de productos rechazados, y la verificación de que todos los productos estén correctamente empaquetados y etiquetados. De esa forma, no se requieren la recopilación manual de estos datos ni registros escritos a mano. Esto hace que la conformidad con las normativas de seguridad alimentaria resulte más sencilla y económica para los fabricantes de alimentos.

Cinco formas en las que la digitalización de la inspección de productos contribuye a la conformidad de la seguridad alimentaria

4. Aumento de la transparencia a través de la conectividad

El esfuerzo de los organismos reguladores y de estandarización para mejorar la conformidad con las normativas de seguridad alimentaria en toda la industria dará lugar a una mayor transparencia en la fabricación de los alimentos. La digitalización es una parte fundamental para desarrollar esta transparencia. Permite a los fabricantes de alimentos recopilar datos significativos de la línea de producción de forma automática para poder alimentar las bases de datos con ellos, así como hacer un control y seguimiento de los sistemas dentro de la cadena de distribución digital.

Los datos de seguridad alimentaria obtenidos por las máquinas de inspección de productos se pueden recopilar y compartir con los sistemas de gestión de producción y ERP a través de una serie de protocolos de conectividad de máquina a máquina seguros y que siguen los estándares de la industria. A su vez, esto hace que para los fabricantes de alimentos resulte más sencillo conservar los registros y mantener la conformidad con las normativas de seguridad alimentaria.

Existe un factor adicional a la transparencia: al adoptarla, los fabricantes de alimentos someten sus fábricas y procesos a un mayor nivel de escrutinio. Esto requiere que sus empleados adopten una mentalidad diferente, lo que nos lleva al quinto ejemplo de cómo la digitalización de la inspección de productos contribuye a la conformidad con la seguridad alimentaria.

5. Cambio cultural

Con la digitalización y la transparencia, nada puede ocultarse. Los procesos relacionados con la seguridad alimentaria, como las comprobaciones periódicas de los equipos de inspección de productos, deben convertirse en parte de la cultura de la fábrica, en lugar de considerarse un ejercicio de marcar casillas. De hecho, fomentar esa cultura es un requisito que se incluye cada vez más en los estándares y normativas.

Los registros digitales se pueden hacer a prueba de manipulaciones, lo que supone un mayor nivel de control del proceso. Es fundamental que todas las partes interesadas sean conscientes de que también se registran los incumplimientos.

Para llevar a cabo este cambio cultural se requieren estrategias de gestión proactivas con las que se logren el compromiso y la motivación de las personas. Es posible que se precisen talleres de formación en los que se presenten objetivos y metas, y se expliquen los beneficios empresariales. También se debe tranquilizar a los empleados preocupados. Una forma de hacerlo podría ser destacando cómo las nuevas formas de trabajo pueden ofrecer nuevas oportunidades y habilidades con las que aumentar su valor para la empresa y, posiblemente, el valor de su propio salario.

Y lo que es más importante para el fabricante de alimentos: desarrollar correctamente esta cultura significa poder cumplir con las normativas de seguridad alimentaria más fácilmente, lo que ayuda a fortalecer su reputación y sus relaciones con los clientes y los organismos reguladores.

La mejora de la conformidad con la seguridad alimentaria es tanto el camino como la meta, y la digitalización de la inspección de productos es una parte fundamental tanto del proceso como del objetivo. Sin embargo, tiene que haber una razón más importante para comenzar el proceso: la automatización, la supervisión en tiempo real de los procesos, el aprovechamiento de los datos digitales, la mayor apertura y transparencia, y la necesidad de gestionar una nueva cultura de forma interna merecen la pena porque contribuyen a que la empresa de un fabricante de alimentos y sus relaciones principales en la cadena de distribución sean mejores y más sólidas. Para obtener más información: www.mt.com/food-safety-digital-pr

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